EL TÉ DE LAS CINCO CON LAS MUJERES DE EL BIERZO

Con motivo de la celebración del Día Internacional de la Mujer, hemos querido hacernos eco de los Premios Mujer de El Bierzo 4.0. e invitar a algunas de sus candidatas a compartir una infusión con nosotros en nuestras instalaciones.

Te contamos cómo hemos pasado la tarde, con estas mujeres luchadoras e inspiradoras.

¿Quiénes han venido a tomarse la infusión con Beatriz Escudero, CEO de Pharmadus? Te las presentamos:



PILAR ALVAREZ MAROTE,

“Si no tenemos algo que nos anime a movernos nos quedamos sin nada”. Por eso, Pilar, desde Asociación de Mujeres La Fuente, promueve actividades que mantengan vivo a Quilos. Ella las llama las “pequeñas cositas”.

JOVITA

“La calidad de vida que hay aquí no se paga con dinero". Eso opina Jovita de su pueblo, Moreda, de apenas 30 habitantes. Organiza fiestas y encuentros para mantener viva la ilusión y animar a este pueblo de Vega de Espinareda. También ayuda a la gente mayor de esta localidad en todo lo que puedan necesitar.

CONSOLA

De vuelta a su Bembibre natal habiendo pasado desde Madrid y Barcelona a las selvas del Perú, esta religiosa de 85 años sigue haciendo lo que más le gusta “ayudar a los que más lo necesitan”. 

MARÍA RODRIGUEZ ALFONSO

"Yo trabajaba de 16.00 a 22.00 y volvía a casa ya de noche pero yo no tenía miedo" Así relata María su vuelta de la mina, en la que empezó a trabajar con 19 años buscando una independencia económica.

ESTEFANÍA PÉREZ

Desde hace 13 años preside la junta local de la AECC en Toreno, a la que llegó tras la muerte de su hijo por esta enfermedad. "Yo, si puedo, ayudo a todo el mundo".

Además de ellas 5, hemos contado con la compañía de Beatriz Ortega, concejala de Villafranca del Bierzo y enfermera en una residencia de la tercera edad y como colaboradora a la hora de conducir este encuentro a Ana Gago, periodista de El Bierzo Digital.

8 MUJERES DE EL BIERZO. MILES DE HISTORIAS QUE CONTAR. ¿CÓMO LO PASARON EN EL “TÉ DE LAS CINCO” TE CONTAMOS LOS MEJORES MOMENTOS 

A María le acompaña su hija. Ha tenido una vida digna de ser contada en una novela. Tanto es así que ha recibido más de un reconocimiento por sus sacrificios, su incesante trabajo dentro y fuera del hogar, y todo ello, como dice su hija sin una sola queja, bueno, quizá una sí: la falta de transporte público que facilitara la movilidad de las personas de su pueblo, Arganza.

De este encuentro se han destilado las necesidades que palpitan en El Bierzo. Jovita, nos cuenta como en su pueblo Moreda, en el que tan sólo viven 30 habitantes, han fabricado y colocado ellos mismos señales para indicar rutas que poder hacer por la zona. A falta de recibir ayudas para impulsar el turismo rural, se encargan ellos mismos de alimentarlo. Dice que lo han aprendido de sus mayores, que les han inculcado el espíritu de lucha. Pero hace falta mucho más. Por eso hace 16 años que se encarga de organizar el Moreda Rock, un festival de música que busca atraer a la gente a este entorno porque como ella dice: “quien viene a el Bierzo marcha enamorado”. Es verdad que para hacer que ese amor dure, también necesitamos cosas más mundanas como fibra óptica para que quien quiera quedarse pueda trabajar, desarrollarse y emprender.

Todas coinciden en que la calidad de vida de El Bierzo es inmejorable, pero que hace falta explotarlo más, industrializarlo para atraer talento y conservar el que ha nacido en esta zona.

“Las mujeres bercianas hemos sido pluriempleadas de todo trabajado que se presentaba muchas veces sin más reconocimiento que servir y amar”. Es de esta afirmación de Consola, Premio a la Labor Social que se ha generado el debate de cómo es la mujer de El Bierzo: fuerte, con coraje, emprendedora, trabajadora, humilde y colaborativa. 

Todos los ingredientes para ser reconocidas y empoderadas.

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