Cuando el calor aprieta y el sol te obliga a buscar sombra hasta en tus pensamientos, lo normal es pensar en bebidas frías, refrescos, cocteles con hielo. ¿Pero una infusión caliente? ¿En serio? Pues sí. Y no, no estamos locos. Quédate que te cuento. Desde hace siglos, en los rincones más calurosos del planeta, la gente se sienta tranquilamente a tomar té humeante a temperaturas que superan, en ocasiones, los 40 grados... ¿Y no mueren en el intento? No, y tampoco lo hacen por cultura, si no por los beneficios que esto tiene. En Pharmadus, llevamos años explorando cómo las plantas pueden cuidarnos, sabemos que el té no es solo cosa de invierno. En este artículo te contamos los mitos que rodean a las infusiones en verano y los trucos naturales que hacen que una taza caliente pueda ayudarte a refrescarte, cuidarte y reconectar contigo, incluso en plena ola de calor.